¿Es la mascarilla una barrera de la comunicación?

¿Te molesta llevar mascarilla para todo? A mí sí, desde luego. Pero ahora es lo que nos toca hacer. Es necesaria para protegernos y proteger a los que nos rodean.

Está claro que este 2020 si por algo se caracteriza, (y que vamos a recordar para siempre), es por esta pandemia que nos tienen en jaque, no sólo a todo el país, sino a todo el mundo.

En cada país la evolución es distinta, y las medidas adoptadas también lo son. No me siento con capacidad ni conocimiento para poner en duda esas medidas, decisiones, o formas de trabajar de nadie en esta situación. Considero dificilísimo tomar decisiones respecto a este tema, a cualquier nivel, con la incertidumbre que nos rodea; hablar de cómo tenía que haber sido cuando ya han pasado las cosas es muy fácil.

Desde luego todas las personas implicadas de cerca en hacer nuestro día a día un poco más llevadero, o mucho, más seguro, o incluso en salvarnos la vida, tienen mi profundo respeto y desde aquí mi humilde homenaje.

Seguramente muchas de las decisiones que se están tomando nos pueden parecer ilógicas (a mí las de educación ya os digo que mucho), poco útiles o nada efectivas, pero no somos expertos y tendremos que esperar.

Así que, aunque vengo a hablar de una de esas medidas, no quiero criticar ni quejarme, sólo trasladaros una reflexión personal que me ha hecho tomar conciencia, e investigar un poquito más sobre el tema. Una reflexión que creo que poca gente está teniendo en cuenta.

Todos/as estamos bastante cansados/as de tener que poner la mascarilla para cualquier actividad que vayamos a realizar. Podemos estar más o menos concienciados de su necesidad, de que sea útil o no, pero en general nos molesta, nos dificulta respirar, nos da calor, nos da dolor de orejas, nos molesta con las gafas o mil problemas más.

Pero qué pasa cuando aparte de todo esto, que puede ser incómodo pero llevadero, tenemos alguna diversidad funcional y la mascarilla pasa a convertirse en una dificultad para nuestro día a día, para comunicarnos.

Mi reflexión surgió a partir de pensar en cómo se sentirían otras personas diferentes a mí con esta obligación, niños y niñas de a partir de sólo 6 años, personas muy mayores, personas con discapacidad intelectual, sensorial…¿Lo habéis pensado? Yo pensé:

¿Se puede convertir la mascarilla en una barrera de la comunicación?

Pues por supuesto, SÍ, y dependiendo de las personas que estén implicadas en ese proceso, puede ser una barrera importante. Vamos a comentarlo un poquito en detalle

¿Conoces qué son las barreras de la comunicación?

Entendemos la comunicación como el proceso de trasmitir y recibir ideas, informaciones y mensajes. Es un proceso complejo en el que se relacionan dos o más personas que, intercambiando mensajes con códigos similares, tratan de comprenderse. Se utiliza un canal como soporte para la transmisión de la información. Este proceso se puede ver afectado por las barreras de la comunicación.

Estas barreras no son más que obstáculos que impiden, limitan o dificultan la transmisión de la información en general, o que deforman el mensaje. Hay varios tipos de barreras comunicativas. Vamos a verlas de forma breve a continuación.

Barreras Semánticas

Las que tienen relación con el significado de las palabras, por desconocimiento o conocimiento erróneo del significado de las palabras (personas que no hablan el mismo idioma, palabras que tienen varios significados, nombres distintos para un mismo objeto, etc). Para evitarlas debemos adecuar nuestra comunicación a las personas implicadas en el proceso.

Barreras Fisiológicas

Impiden emitir o recibir con claridad y precisión un mensaje, debido a dificultades físicas del emisor o del receptor que pueden afectar a cualquiera de los sentidos, ya sea de forma total o parcial (discapacidad auditiva o visual, por ejemplo). Son barreras que también pueden ser debidas a enfermedades transitorias (afonía, conjuntivitis, etc.)

Barreras Psicológicas

Cada persona interpreta según sus experiencias previas, creencias, actitudes, inseguridades, etc., y esto afecta a la comunicación. En este grupo podemos incluir los estereotipos y prejuicios, generalizaciones, estados emocionales (temor, odio, timidez hacia el emisor o receptor), etc.

Barreras Físicas

Son las circunstancias que no se presentan en las personas, sino en el medio ambiente, y que impiden una buena comunicación. Por ejemplo, ruidos, iluminación, distancia, deficiencia de los medios que se utilizan para transmitir (como un corte de internet durante una formación online), así como un exceso de estímulos. Estas barreras exigen mucho esfuerzo para mantener la atención y afectan al interés.

Barreras Administrativas

Se dan en organizaciones o  grandes empresas, cuando hay indicaciones confusas, sobrecarga de información, un tiempo insuficiente, falta de planificación, etc. Por ejemplo en una oficina un trabajo no se realiza correctamente porque las instrucciones no han sido claras.

Barreras Socioculturales

La distinta procedencia cultural, nivel socioeconómico, costumbres, pueden generar malentendidos y distorsionar o impedir la comunicación.

Una vez vistos en resumen los tipos de barreras que hay, vemos que la mascarilla estaría incluida en una barrera física. Entonces,

¿En qué colectivo pensáis que afecta la mascarilla como barrera?

Todo esto me llevó a pensar en las personas sordas. Quien me conoce sabe que siempre me ha fascinado la lengua de signos, y que llevo muchos años queriendo aprender a comunicarme en esta lengua perfectamente, pero por situaciones de la vida sólo he podido, de momento, realizar el curso para tener un nivel A2.

¿Qué pasa cuando tu forma principal de comunicación se basa en leer los labios de las personas que te hablan, en su expresión facial, aparte de en sus gestos corporales? Que evidentemente, al taparnos media cara con la mascarilla, incluida la boca, la dificultad de la comunicación aumenta.

Entrevista a una persona sorda

Así que quise acercarme a la realidad de personas sordas, para comprobar en qué grado les estaba afectando la obligatoriedad de la mascarilla, y la pandemia en general. Pregunté en varias asociaciones, y fue la Asociación de Personas Sordas de Vigo la que me atendió con muchísima rapidez, cercanía y amabilidad a través de una intérprete. Les doy las gracias por su gran atención. Os dejo algunas de las preguntas de esta entrevista que me parecieron interesantes:

• ¿Consideráis que la obligatoriedad de llevar mascarilla os limita más la comunicación?

“Sí, siempre hemos tenido barreras en la comunicación, pero la mascarilla es mucho peor, porque no podemos hacer lectura labial ni ver la expresión de la cara, lo que es necesario para nuestra comunicación. Sí que nos sentimos muy limitados.”

• ¿Existe alguna alternativa a la mascarilla?

“Ahora mismo no hay mascarillas transparentes válidas. Aunque hay alguna persona que sí ha empezado a hacerlas tienen problemas como que se empañan con el vaho.

No hay ahora alternativa, conocemos que hay alguna empresa en Barcelona que hace mascarillas transparentes en un material que no se empaña, pero no son mascarillas homologadas, entonces actualmente es muy difícil saber si una mascarilla vale o no vale, hay mucha confusión, y además el coste seguramente sea alto.”

• ¿Además de la mascarilla, la situación de esta pandemia os genera más dificultades?

“Sí, como problema añadido tenemos, por ejemplo, que en la pandemia, actualmente la sanidad pública obliga al médico de cabecera a hacer la atención por teléfono, lo que hace que una persona sorda no pueda recibir esta atención. Necesitan atención presencial. El 96% de las personas con esta diversidad no pueden utilizar el teléfono como medio de comunicación.”

¿Todos/as podemos hacer algo que nos acerque a una sociedad inclusiva?

• ¿Qué podemos hacer cualquier persona en el día a día para que la inclusión de todas las personas sea una realidad?

“La persona oyente sólo tiene que darse cuenta de que no somos todos iguales, que hay diversidad, da igual que sea una persona con discapacidad, que una persona de otro país, y que cualquier ciudadano tiene que adaptarse a la realidad que le rodea. Igual que nosotros nos adaptamos a lo que hay, si se encuentran con una persona con alguna dificultad, deben intentar no limitarse y no ponerse barreras él mismo, sólo adaptarse.”

¿No os parece un consejo maravilloso? Tan sencillo y sin embargo nos cuesta tanto llevarlo a la práctica.

Algún recurso educativo

Como profesora, me interesaba conocer si disponían de algún recurso educativo para trabajar en el aula, con el fin de acercarnos a conseguir esta inclusión. El recurso educativo principal que me dieron es la Lengua de Signos como tal. Enseñársela a nuestro alumnado. Si no eres profe puedes enseñársela también a tus hijos/as.

También me remitieron para el tema de recursos a la Federación. Estoy pendiente de hablar con el contacto que me facilitaron, ahora cuando empiece septiembre. Pero mientras, os dejo aquí algunas aportaciones:

– La web del Diccionario de Lengua de Signos Española, con más de 3500 términos recogidos. Puedes buscar una palabra y aparece la definición escrita y el signo de ella.

– Nuestro alfabeto dactilológico en madera, no sé si lo conocéis, como recurso para acercarnos a esta lengua. Se puede utilizar desde Infantil hasta cualquier nivel. De hecho surgió la necesidad en el aula del Ciclo Superior de Integración Social, con nuestro alumnado, y por eso lo elaboramos al principio.

– Alguna formación en Lengua de Signos. Debido a la situación que tenemos con el Covid-19 las formaciones presenciales ahora mismo suelen estar aplazadas. En algunas Asociaciones disponen de cursos online. He encontrado en la Federación de Galicia cursos de los primeros niveles A1-A2, y en la Asociación de Madrid, cursos de hasta nivel B2

– Una de los apartados de la web de la Faxpg ( Federación de Asociacións de Persoas Xordas de Galicia), porque encontré un recurso que me encantó allí. Se trata de un documento muy interesante de Pautas y Recursos para profesorado con alumnado de infantil y primaria sordo. Lo encontráis en la columna de la derecha para descargar. Y aunque no tengamos alumnado con estas características es un documento muy completo donde podemos aprender mucha información, recursos, estrategias y actividades que podemos incluir tanto en nuestra aula como en familia, sin necesidad de tener contacto directo con una persona sorda, sino para acercarnos a las realidades de otras personas, desarrollar la empatía, la solidaridad, el respeto, la tolerancia y un deseo de ayuda e implicación con los demás desde la infancia.

He preferido dejaros el enlace que el documento aquí directamente por dos razones, una porque así podéis daros una vuelta por toda la web que tienen información muy interesante, y otra porque supongo que en la web contabilizarán las personas que descarguen el contenido, y si se hace desde aquí no tendrán manera de seguir ese conteo.

Ampliaré estos recursos o escribiré otra entrada cuando contacte con la Federación. ¿Te interesan?, ¿te habías parado a pensar en estas situaciones que pueden derivar del uso de la mascarilla, o de la pandemia en general?, ¿te ha parecido útil esta reflexión/información?

Me gustaría conocer tu opinión, ya sabes que puedes dejarme aquí un mensaje o contactarme aquí, estaré encantada de leerte/escucharte. Y si crees que puedes ayudar o hacer reflexionar a alguien siempre te agradezco que compartas.

¡Muchas gracias por leer hasta aquí!